Cuenta atrás

Si sumo todos los nervios que he pasado a lo largo de toda mi vida con todos y cada uno de los exámenes que he hecho, no me acerco ni de lejos a los 'nervios' ante la incertidumbre de qué pasará a partir de ahora con la vida de P. y la mía.

Donde ya no hay sitio para la incertidumbre y la duda es en el pasado; ya hicimos el viaje de venida, business primerísima clase rosquilletas divinas incluidas.

Ahora en casa de E. entre algodones... entre mantas y calorías... viviendo estos días mucho, muchísimo mejor de lo que esperaba. Y es que con tanta ayuda como estoy recibiendo no podía ser de otra manera.

Echo de menos a P. ahora que estoy sin él, pero como también sabeis, necesitaba mucho estar un poco sola, acomodar la cabeza, descansar el cuerpo y dormir diez horas. Poder cuidarme para poder seguir cuidándole.

En la foto, aunque no lo parezca, brilla el Sol.